
Paseo con correa suelta: no solo hace los paseos más agradables, también fortalece la relación entre tú y tu perro. Enseñar esta técnica requiere paciencia, práctica y las herramientas adecuadas. En esta guía completa aprenderás cómo lograrlo paso a paso.
Índice
El paseo con correa suelta significa que tu perro camina a tu lado sin tensar la correa. No tira, no se adelanta, y mantiene su atención en ti. Esto no implica que vaya “pegado” al talón, pero sí que respeta el espacio y no crea tensión.
¿Tu perro tira de la correa en cada paseo? No estás solo. Muchos dueños se enfrentan al mismo problema, pero la buena noticia es que caminar con correa suelta es algo que cualquier perro puede aprender. Este tipo de paseo no solo mejora tu control y la seguridad de tu perro, sino que también hace que salir a la calle sea una experiencia mucho más relajada y placentera para ambos.
El paseo con correa suelta no se trata de obediencia rígida, sino de caminar juntos, a un ritmo tranquilo, sin tensión en la correa. Aprender esta habilidad lleva tiempo, pero con práctica constante, refuerzo positivo y una actitud paciente, tu perro puede dejar atrás los tirones y caminar a tu lado con tranquilidad.
Paso 1: Elige la correa adecuada
Para comenzar, usa una correa de 1,5 a 2 metros. Evita correas extensibles, ya que dificultan el control. Un arnés cómodo puede ayudarte a evitar tirones y distribuir mejor la presión.
Paso 2: Empieza en un lugar tranquilo
Inicia el entrenamiento en casa o en un lugar con pocas distracciones. Premia con golosinas cuando tu perro camine a tu lado sin tensar la correa.
Paso 3: Marca el comportamiento deseado
Usa un comando como “aquí” o “junto” cada vez que esté a tu lado. Refuerza positivamente con snacks o caricias.
Paso 4: Cambia de dirección
Cuando tu perro tire, detente. Si insiste, cambia de dirección. Esto enseña que solo avanza si camina contigo.
Paso 5: Aumenta la dificultad
Una vez que domine la caminata tranquila en casa o zonas seguras, ve introduciendo más distracciones gradualmente: parques, calles, otros perros.
Paso 6: Sé constante
No dejes que tire “solo esta vez”. La coherencia es clave. Incluso 10 minutos al día pueden marcar la diferencia.
Caminar con correa suelta transforma la experiencia del paseo. Con práctica, paciencia y consistencia, tú y tu perro disfrutaréis juntos de caminatas tranquilas, seguras y llenas de conexión.
Foto de Artem Beliaikin en Unsplash